Por Laura Romero, finalista del Premio LabEmilia 2016 al mejor proyecto de álbum ilustrado
Pasado poco más de una semana de mi llegada a Madrid después del viaje a Bolonia, he tenido que posar todo lo vivido, aprendido y andado durante los días pasados. Y es que la Feria de ilustración de Bolonia ha sido una fuente inagotable de recursos, estímulos y conocimiento.
Antes de la Feria
Era mi primera Feria de Bolonia y, como faltaba poco para mi viaje, no pude concertar ninguna cita, así que me centré en preparar el trabajo que quería mostrar y mis tarjetas de presentación. Hice un portafolio físico con algún dibujo original de dos proyectos de álbum ilustrados en los que estoy trabajando y alguna ilustración sin contexto. Luego, diseñé postales y tarjetas de visita con ilustraciones. Preparé el dosier con mucha emoción: era la primera vez que iba a mostrar de esta manera mis ilustraciones, y además ya partía desde Madrid con un reconocimiento hacia mi trabajo, pues apenas dos meses antes el Laboratorio Emilia había seleccionado mi proyecto como finalista en su convocatoria al mejor proyecto de álbum ilustrado.
Viajé a Bolonia un día antes de la Feria. Había quedado en el aeropuerto con Inés Miret, del Laboratorio Emilia. Tenía muchas ganas de conocerla tanto a ella como a Dolores Prades para agradecerles su apoyo a mi trabajo. Antes de encontrarme con Inés, había estado un rato esperando en la sala VIP de Iberia. No sé cómo llegué a tener ese vuelo business… pero allí estaba, como una very important person 😉
Mi primer día apenas pude callejear, pero me encontré una moneda de dos euros en el suelo que me acompañaría como amuleto ;D Por la noche conocí a Dolores Prades y a Neus Caamaño y Helena Morillas (ganadora y finalista, respectivamente, del certamen al mejor proyecto de álbum ilustrado de Laboratorio Emilia).
Primer día de feria, 3 de Abril 2017
Había quedado temprano en la entrada de la Feria con Inés, Dolores, Neus y Helena. La primera aventura fue coger un taxi, muy difícil en días de Feria. Compartí uno con Chiara. Durante el trayecto Chiara quiso ver mi portfolio y pude empaparme de consejos de una persona que llevaba muchos años en esto.
Ya en la Feria me encontré con Inés, Dolores, Neus y Helena y dimos una vuelta por los stands españoles. Dolores nos fue contando y aconsejando. Después, nos separamos y comencé mi andadura por los pasillos. Al no tener citas quería ir al ritmo que surgiera: empaparme del ambiente, hacer contactos, vivir la experiencia. Fui siguiendo casi por instinto dónde veía que mi trabajo podía encajar y allí preguntaba si habría algún hueco para ver mi portfolio. Si no lo tenían, podría adquirir el contacto de los editores para más adelante escribirles.
Al poco rato pregunté en una editorial belga que me encantó. El editor me concedió un ratito y me pidió que le enviase el PDF con mi último proyecto. Muy contenta apunté la experiencia en mi libreta de viaje. Y así pasó mi primer día en la Feria: de editorial en editorial, haciendo contactos, en algunas enseñando mi trabajo… Obtuve feedback muy constructivos de editores que me pidieron que les enviase más material. Incluso, concerté una cita para el día siguiente con una editorial italiana, Settenove. Así que, como primer día, ¡no estuvo nada mal!
A las 16:00, Miguel Tanco nos había citado a los exalumnos del curso de ilustración de Rataplán para ver portfolio y ponernos caras. Me alegró mucho conocer a Miguel y a los demás compañeros del curso, así como su trabajo, realmente bueno.
La salida de la Feria fue algo caótica… fue necesario esperar bastante para coger los autobuses de vuelta al centro de la ciudad. Cuando llegué a la casa, ¡estaba molida! Me quedó un poco de energía para salir a cenar y encontré la librería Coop, que tiene un restaurante en la planta de arriba. Además tuve la suerte de quedar con Raquel Bonita y compartir nuestras andanzas por la Feria.
Segundo día de feria, 4 de Abril 2017
Tras la experiencia del día anterior, fui directamente a una parada de taxis y compartí uno con otra ilustradora. Llegué bastante antes de la hora de la cita y me detuve en una cola pequeña frente a la editorial Nubeocho, en la que solo miraban trabajos con cita. Allí conocí a Nuria, que trabajaba en otra editorial italiana. Conectamos y se ofreció a hacerme un hueco con el editor de su editorial. Y así fue: Massimiliano vio mi trabajo y me pidió que le enviase el PDF. A las 11:00 fui a la cita con Mónica, quien estuvo muy interesada y me pidió el PDF del proyecto “el niño que fue pastor de bolas de nieve”.
Continué mi andadura y llegué a la editorial Kalimat, de los Emiratos Árabes. Me pidieron que les enviase los dos proyectos de álbum traducidos. Y en uno en concreto estuvieron mucho rato preguntando. ¡Al final vieron el trabajo muchas personas!
El resto de la tarde lo dediqué a esperar alguna fila donde editoriales abren un espacio de tiempo para ver portfolios sin cita previa.
Tercer día de feria, 5 de Abril 2017
Ya comparto los taxis por la mañana como algo habitual… Hoy conocí a Elena, de Guatemala, y a Steve, de Oxford, con quienes me cité a las 12:00 h. en el Illustrator Survival Corner, punto de encuentro y actividades de la Feria. Antes recorrí unos pasillos que todavía no conocía. Me topo con una editorial del Líbano, en la que veo que encaja mi trabajo, y pregunto si tienen hueco para ver portfolios. Joanna me dice que no, que lo siente mucho, pero cuando le doy una de mis tarjetas se queda parada mirándola y me dice que ok… que quiere ver más dibujos míos. Me lleva a un pasillo central y nos sentamos en el suelo, pasando las hojas de mi portfolio. Joanna me dice que tiene que irse, pero quiere seguir viendo mi trabajo. Así que me cita a las 17:00 h.
A las 12:00 h. voy al Illustrator Survival Corner para ver a Elena y Steve. Con ellos está Vivian, escritora del Reino Unido, de 70 años. Hablamos, le encanta mi trabajo y me dice que va a hablar con un agente que conoce para ver si tiene un hueco para recibirme. Me dice: Don´t move!! Y allí la espero…. Al rato vuelve dándome el contacto, porque no había sido posible sacar el hueco.
Más tarde voy al stand de la editorial Pípala, pues apunté que a las 14:00 h. miraban portfolios. Cuando llegué ya había bastante cola. Algo me decía que esta la debía hacer. Miraban el portfolio tres editoriales, de Argentina, Portugal y Nueva York. En la argentina me dijeron que estaban interesados y que me iban a llamar. No sé si esto es muy común, la verdad…. El caso es que me cargó mucho de energía este tipo de comentarios.
Cuarto día de feria, 6 de Abril 2017
El jueves, último día, el cansancio se nota en todo el mundo: son muchas horas andando, concentrada… El último día solo es por la mañana y muchas editoriales recogen antes de tiempo. Es un buen momento para ver rincones nuevos con otro ritmo, ver las exposiciones… Aproveché para hacer dos contactos y ver libros, ya que en muchos stands estaban más rebajados de precio.
Como yo tenía el vuelo de vuelta al día siguiente, tuve un día de más para conocer la ciudad. Pude callejear, ver museos….El MAMbo! Agradecí el silencio de un museo de arte moderno y el regalo de disfrutar del arte en un ambiente tan íntimo y calmado.
Algunas conclusiones
- La feria de ilustración de Bolonia es una experiencia única para hacer una red de contactos y conocer qué se está moviendo en ese momento en el mundo de la ilustración.
- Es importante creer en tu trabajo, sentirlo, vivirlo y quererlo. Al final es eso lo que vas a transmitir.
- Es mejor ir sin estrés, dejar fluir los momentos, no cerrarse y estar abierto a conocer.
- Importante llevar una libreta donde apuntes TODO lo que te va pasando y recojas datos de interés. A la vuelta lo agradecerás.
- Necesario provocar momentos de encuentro para valorar el trabajo de otros compañeros de profesión. Ellos están como tú y siempre es reconfortante que valoren constructivamente lo que haces.
- Procurar quitarse de la cabeza pensamientos como que los demás hacen mejores cosas que tú… o que no hay hueco para ti. Alguien te está buscando y no lo sabe todavía ;D.
Una vez más, quiero agradecer al Laboratorio Emilia por el reconocimiento a mi trabajo y en especial a Dolores e Inés por valorarlo tantísimo y cuidarme con tanto cariño durante el viaje a Bolonia.
¡Hasta la próxima!